Irapuato, Guanajuato
El nuevo santo de los mexicanos será el “niño cristero” gracias a que el Papa Francisco autorizó la canonización, José Sánchez del Rio, un joven de 14 años asesinado durante el conflicto religioso en el país (1926-1929).
Según informó el Vaticano, el pontífice aprobó un milagro atribuido a la intercesión del adolescente, que ostentaba el título de beato, el penúltimo paso antes de su reconocimiento como santo de la Iglesia católica.
La aprobación tuvo lugar durante una audiencia de Jorge Mario Bergoglio con el cardenal Angelo Amato, prefecto de la Congregación para las Causas de los Santos del Vaticano.
Contexto Niño Cristero”
Nacido en Sahuayo Michoacán, el 28 de marzo de 1913, fue un joven destacado católico que participó de las vanguardias locales de la Acción Católica de la Juventud Mexicano y cuando se suscitó la guerra cristera en 1926 quiso unirse a las fuerzas de resistencia, pero su madre no lo permitió.
Luego de una inicial negativa a su alistamiento en las fuerzas cristeras guiadas por el general Prudencio Mendoza, finalmente el joven logró ingresar en el grupo. Convenció a su madre con la frase: “Nunca ha sido tan fácil ganarse el cielo como ahora”.
El 6 de febrero de 1928, durante una batalla, el muchacho dio su caballo al general y así lo salvó, quedando él prisionero de las tropas gubernamentales.
Tras cuatro días de cautiverio, los hombres del ejército federal lo sacaron de la parroquia donde estaba preso, le cortaron las plantas de los pies y lo condujeron descalzo por las calles de Sahuayo hasta el Panteón Municipal.
Ante una tumba ya preparada fue ahorcado y acuchillado por sus verdugos, uno de ellos, Rafael Gil Martínez, alias “El Zamorano”, lo bajo del árbol y lo remató con un tiro en la sien.