A la memoria de Samaí.
Es escandaloso ver que existe una cultura feminicida en expansión.
Pienso lo anterior mientras recapitulo en los sucesos sangrientos en contra de mujeres que han caracterizado al estado de Puebla en los últimos días. Sólo para que tenga usted una idea el pasado fin de semana cuatro mujeres fueron asesinadas en diferentes zonas de la entidad (e-consulta goo.gl/mqNwDY Novio de Samaí la asesinó por su embarazo, concluye la FGE).
Ante la situación convulsa en nuestro país, y particularmente en Puebla, es necesario avanzar en nuevas formas de organización social al servicio de la integridad y vida de las personas.
A manera de un primer intento, a través de mis muros de las distintas redes sociales he reenviado en múltiples ocasiones las solicitudes de ayuda en que los diversos colectivos me han etiquetado –mención especial merece en esa labor solidaria la compañera Elda Ruíz Flores, activista y comunicadora-.
Pero, no ha sido suficiente, las personas siguen desapareciendo y, en el caso de las mujeres éstas siguen muriendo y con ello abundando en ese escenario terrorífico de las últimas semanas.
¿Qué vamos a hacer los ciudadanos en medio de este caos?
La pregunta obliga la respuesta: entre todos juntos sumemos nuestros conocimientos, pero que hoy se encuentra desarticulado. Me refiero a la inteligencia colectiva.
La colaboración entre muchos seres humanos es decisiva.
La participación de miles de personas, a veces millones, en un determinado sentido está ofreciendo resultados concretos, por ejemplo, en materia de seguridad, pero falta aún más. Bien podríamos apoyarnos en el uso diseminado de redes sociales como Facebook, Twitter, Instagram, entre otros, pero de esto hablaremos en un siguiente artículo.
Por ahora quiero compartir con usted las aplicaciones “antisecuestro” para smartphones.
En el 2010 la empresa mexicana Futuro Móvil creó una aplicación para teléfonos móviles con el fin de alertar a las autoridades, y a través de las redes sociales a los familiares y amigos de la víctima, es decir, una especie de botón de pánico virtual.
El año pasado Ángel Carrillo, mexicano de 23 años y estudiante de la Universidad Politécnica de Tlaxcala, presentó NeuroappSuces (goo.gl/xFBoUB), una app que con sólo apretar un botón del teléfono inteligente, informa silenciosamente a nuestros contactos sobre el lugar en el que nos encontramos cada dos o tres minutos, sin que necesariamente se tenga que contar con saldo.
Además de los anteriores esfuerzos, en Play Store ya operan dos aplicaciones “antisecuestro” que usted puede descargar gratuitamente: Grigori y GPS BodyGuard – SOS emergencia, y aunque no he experimentado las dos aplicaciones anteriores se pueden leer comentarios muy favorables.
Por supuesto esto no excluye la exigencia política, social y jurídica que debemos ejercer sobre las autoridades y la aplicación de las sanciones hacia los responsables.
Tenemos que hacer un alto para organizarnos y sacar provecho a nuestra inteligencia colectiva, tenemos mucho a nuestro favor considerando que en Puebla hay muchas universidades, organizaciones civiles de todo tipo y personas talentosas que bien poniendo un poco de sí podrían generar herramientas cimentadas en lo que saben algunos para potenciar lo que sabemos todos.
Vale la pena no rendirse. Llegó la hora de potenciar nuestro saber al servicio de los demás.