León, Guanajuato
El Rector General de la Universidad de Guanajuato, Dr. Luis Felipe Guerrero Agripino dictó la conferencia magistral “Los desafíos de la juventud universitaria en la modernidad” en el marco del XIX Simposio Mundial de Liderazgo organizado por la Universidad Humani Mundial Plantel León.
El Rector General de la Universidad de Guanajuato habló ante un auditorio integrado por estudiantes, profesores y comunidad interesada en la educación. Se refirió en principio a la juventud universitaria y los retos que deben desafiar utilizando a la educación como un potencial transformador de las personas y las sociedades.
El Dr. Guerrero Agripino dijo que es importante entender el contexto nacional y global en el que habitan tanto bondades como riesgos, en este sentido hizo mención de las generaciones que ahora están inmersas en las tecnologías de la información y la comunicación, las cuales generan un cambio de paradigmas sociales.
Hizo mención de que en la actualidad otro aspecto en el que hay que poner atención es en que la corrupción y la violencia son situaciones endémicas de la sociedad lo que da como consecuencia una cultura de la desconfianza. “La educación es una herramienta en la que tenemos que incidir para erradicar la violencia y fomentar una cultura de legalidad y respeto a los derechos. Hablar de violencia no sólo implica asumirnos en el rol eterno de víctimas, sino también reflexionar en el rol que desempeñamos en la sociedad”.
Continuó la conferencia aseverando que ante el cambio de paradigmas es importante pensar en el compromiso social de ser universitario pues la educación superior implica aprendizaje, competencias, experiencias, ideales, valores e incluso ignorancias. “El nuevo modelo educativo implica aprender para toda la vida, las experiencias de vida contribuyen a enriquecer ese conocimiento. La labor de la educación no es construir máquinas de sabiduría, sino personas autónomas que contribuyan a solucionar problemáticas”.
De igual forma dijo que son relevantes los ideales que los estudiantes construyen y cómo los reflejan en su ejercicio profesional, “una educación sin contenido ético no es significativa para el desarrollo de la sociedad”.
Para concluir indicó que la formación universitaria conlleva varios retos para la juventud, pero ésta debe tener valentía y responsabilidad para enfrentar que en sus manos está la construcción de un mejor México.
