Cuál cariño es el que dices
que te di con toda el alma
cuando abriste tú conmigo
las persianas del tenampa.
Dolores Hidalgo, Guanajuato. – En 1973, José Alfredo Jiménez era visto por médicos desde principios de año para atenderle una cirrosis hepática. Se plantó frente a su compañera de parrandas, Chavela Vargas, y le dijo, de borracho a borracho –como ella lo definía-: “me dieron tres meses de vida”.
Llamaron a Tomás Méndez, también compositor y uno de los principales musicalizadores de las canciones de el de Dolores Hidalgo y se fueron a Garibaldi, para cerrar el Salón Tenampa, la mítica casi centenaria cantina de la ciudad de México que se ha convertido en santuario joséalfrediano.
Contaba Chavela Vargas, mexicana a la que le dio su chingada gana nacer en Costa Rica, que fue una borrachera de tres días, entre botellas y canciones, para despedirse de este mundo y alejarse del bullicio y de la falsa sociedad.
La cirrosis hepática mandó a José Alfredo en el hospital a finales de 1972. A principios de 1973 se despedía de su público en el programa Siempre en Domingo. En esa ocasión, desde la ciudad de México, cantó Tres Corazones, también llamada “Gracias”. Como no dejó de beber, fue hospitalizado nuevamente, se recuperó y meses después, en mayo, demacrado, con apariencia de un hombre de 60 o más años, regresó al programa conducido por Raúl Velasco. En esa ocasión la transmisión fue desde el Centro de Convenciones de Acapulco. José Alfredo interpretó “El rey”.
Al continuar bebiendo, en agosto de 1973 le dijeron que estaba desahuciado. Fue entonces que decidió despedirse del mundo con alcohol, canciones y la gente que amaba. En noviembre terminó su vida.
Tú qué sabes de parranda,
tú qué entiendes de pasiones;
tú cuando oyes un mariachi
ni comprendes sus canciones
La llamada Catedral del Mariachi abrió en 1915, fundada por Juan Indalecio Hernández en plena revolución, para convertirse en refugio favorito de José Alfredo Jiménez, Lucha Reyes y Chavela Vargas, entre muchos otros.
Ahí fue presentado, además del Palacio de Bellas Artes, el programa del Festival que conmemora el aniversario luctuoso 50 del vate dolorense.
El lugar está decorado con un mural que honra a José Alfredo y donde plasma la letra de “Mi tenampa”, dedicada a esas largas borracheras que terminarían con una última, previa a la hospitalización definitiva y la consabida muerte del compositor, registrada el 23 de noviembre de 1973.
Le rodean cuadros de Chavela Vargas, Pedro Infante, y Juan Gabriel, Vicente y Alejandro Fernández, entre otros. Son obras de Felipe Aguilera.
Chavela Vargas y José Alfredo se sentaban en el lado izquierdo de la entrada. Se conserva la mesa donde ambos acostumbraban tomar la copa y pasar no horas enteras, sino días cantando y brindando con tequila.
Parranda y tenampa,
mariachi y canciones:
así es como vivo yo.
Sus espíritus departen y brindan con las ánimas de artistas, intelectuales y políticos con figuras como Tin Tan, Cantinflas, Cornelio Reyna y Frida Kahlo, Chavela Vargas, que pasaban horas ahí, en ese lugar también afamado como locación de cine. Sus propietarios han documentado más de 160 filmes.
Tú qué sabes de la vida,
de la vida entre las copas:
Tú, pa’ ser mi consentida
necesitas muchas cosas.
Juan Gabriel conoció ahí a José Alfredo y en sus mesas han estado también Paulina Rubio, Salma Hayek y Luis Miguel, a quien recuerdan por haber cerrado en una ocasión en lugar para cantar durante horas.
Entre quienes han visitado el Tenampa sobresalen Sylvester Stallone, el diseñador Óscar de la Renta, Ricardo Arjona, Kate del Castillo, Sergio Corona, Silvia Pinal, así como presidentes e importantes políticos nacionales e internacionales.
Yo me paro en la cantina
y a salud de las ingratas
hago que se sirva vino
pa’ que nazcan serenatas.
El Tenampa no es sólo un restaurante-bar, es un museo viviente. Por eso ahí estuvieron la secretaria de Cultura del gobierno de México, Alejandra Frausto; el gobernador del estado de Guanajuato, Diego Sinhue Rodríguez Vallejo y la hija de José Alfredo, Paloma Jiménez, para dar a conocer el programa del Festival en honor al dolorense.
Y una vez ya bien servido
Voy al rumbo del tenampa
Y ahí me agarro a mi mariachi
Y a cantar con toda el alma
José Alfredo murió a los 47 años y será recordado con el programa del Homenaje nacional por el 50 aniversario luctuoso, que celebrará en su ciudad natal, el 14 Festival José Alfredo Jiménez del 22 al 26 de noviembre.
El compositor y cantante legó más de 300 canciones que hoy son emblema de su amor a México, país que ahora, a cinco décadas de su partida, lo celebra con 83 actividades en 24 estados. Aunque, esencialmente, el festejo se hará en Guanajuato y en la Ciudad de México, en el Palacio de Bellas Artes, los próximos 2 y 3 de septiembre, cuando la Orquesta Sinfónica Nacional ejecute un programa con 20 de sus melodías más emblemáticas. También en el Festival Cervantino en su edición 51 se celebrará al artista.
Mi papá consideraba a las cantinas como refugios, dijo Paloma en el Tenampa y leyó una estrofa que el maestro de Dolores Hidalgo dedicó al lugar.
Parranda y tenampa,
mariachi y canciones:
así es como vivo yo.
Tú qué sabes de la vida,
de la vida entre las copas:
Tú, pa’ ser mi consentida,
necesitas muchas cosas.
