La comunidad se encuentra a escasos dos kilómetros de la cabecera municipal y es considerada uno de los lugares más bonitos a visitar
Cuerámaro, Guanajuato.- Detrás de la reja principal se observa un nogal con miles de nueces colgando, pero más al fondo existen poco más de 40 especies de frutas y verduras que forman parte de un gran vivero orgánico en el que la familia Muñoz Cabrera trabaja para venderlos.
José Luis Ramírez Muñoz, su esposa María de Jesús Cabrera y Juan Cabrera, son las personas encargadas de cultivar e ir dando forma a cada uno de los productos que esperan vender los domingos en el mercado de Cuerámaro.
Aquí no sólo existe el clásico maíz blanco, sino que también tienen el amarillo y el rojo, este último usado para el pozole; pero ahí no para, porque entre el espacio que tienen destinado para la siembre hay calabaza, calabacita, espinacas, lechugas.
Además de duraznos, membrillos, papayas, manzanas, sandias, melones, ciruelas, frijoles, zanahorias, chayotes, naranjas, mandarinas, guayabas, rábanos, pepinos, sólo por mencionar algunas de las especies que ahí se cultivan.
Este sitio no es tan común como en otros lugares, debido a que parte de su cuidado se trata a base de fertilizante orgánico “por eso tengo la plaza, pepino tiernito y recién cortado, tengo calabacitas” dijo el hombre que dijo haber decidido darle variedad a su tierra con varios productos que con uno solo.
En el Platanal el ambiente es muy parecido que en la casa de los Muñoz, pues aquí atraviesa un canal de agua dulce que surte los predios de la zona, donde se pueden observar grandes árboles de sabino, guayaba, lima y naranja.
La comunidad se encuentra a escasos dos kilómetros de la cabecera municipal y es considerado uno de los lugares más bonitos a visitar por la gran vegetación, caudal y árboles que se forman como un gran bosque.
