Irapuato, Guanajuato.- Alejandro y Fernanda, son una pareja de amigos que el sábado por noche después de disfrutar de una velada en un antrode Irapuato, sufrieron acoso por parte del conductor de Uber.
Después de haber pasado una noche increíble en uno de los antros ubicados en Villas de Irapuato, ambos acordaron en acompañar a una amiga que se encontraba con ellos a su casa para después tomar otro transporte y dirigirse a la vivienda de uno de ellos donde dormirian.
Luego de dejar a la primer chica en su casa, el joven Alejandro, pidió a través de la plataforma de Uber, un automóvil, este tardo en llegar aproximadamente 10 minutos, una vez ahí el chofer se comunicó con él y junto con su amiga Fernanda se dispusieron a subir al vehículo.
Una vez arriba, Fernanda comenzó a dormitar por su gran estado de ebriedad y por las altas horas de la noche, por lo que Alejandro tuvo que cuidar de ella, en el camino el chofer del Uber comenzó a decir comentarios fuera de lugar al joven, el cual al igual que su amiga comenzaba a dormitar, entre las insinuaciones del chofer, este le dijo: “Que onda hacemos un sándwich, tú, tu amiga y yo…”, por lo que el joven inmediatamente se alarmó y decidió quedarse despierto y solo logró contestar con un “¿que le pasa?”, el conductor siguió con sus comentario, sin embargo, el joven solo lo ignoró, pensando que se este manejará más rápido para llegar a casa.
Ya faltando poco para llegar a su vivienda, el trabajador de la plataforma Uber, tomó su teléfono y le mandó un audio a una persona desconocida diciéndole: “traigo a dos princesas aquí en el auto, ¿jalas o qué onda?”.
Alejandro al escuchar este comentario, de nueva cuenta se alarmó y solo optó por decir que le sucedía, una vez cerca de su casa, los jóvenes decidieron bajarse del automóvil e irse caminando, exponiéndose de nuevo.
El joven al día siguiente denunció a través de la plataforma al conductor, para que más jóvenes no sufran acoso por parte de este sujetos.
