Yuriria, Guanajuato.- Cientos de hectáreas de la Laguna de Yuriria continúan invadidas por el lirio acuático, lo cual ha puesto en “riesgo” el ecoturismo, a la principal actividad del lugar, la pesca y no sólo eso, sino a la propia fauna. Parecen ser lentos e inconstantes los trabajos por parte de la Comisión Nacional del Agua (Conagua), encargada del retiro de lirio, mientras que éste se reproduce a paso “veloz”.
De acuerdo al testimonio de uno de los lancheros de la zona, el lirio acuático no ha sido retirado “porque no hay donde ponerlo”, su trabajo ha sido afectado y aunque no se ha detenido sí tienen que sortear el peligro que causa la maleza porque las lanchas no pueden pasar con libertad.
Otros afectados son los propios pescadores, muchos viven de esta actividad y debido a que gran parte de la Laguna se encuentra invadida del lirio, muchos peces mueren y la producción pesquera disminuye y por ende la actividad turística.
El lirio no permite que los rayos del sol entren al agua por lo que mucha fauna de lugar se ve afectada, además la gran contaminación del agua está terminando con este lugar, que fue planeado como un atractivo turístico.
Y aunque se han invertido millones y millones de pesos para extraer y controlar el lirio en cientos de hectáreas la realidad es que no ha dejado de ser un problema y no se han tenido resultados exitosos.
El año pasado la Conagua apoyó con una máquina trituradora del lirio, la cual al parecer se encuentra parada y sin trabajar para erradicar esta problemática.
Su titular, Humberto Navarro se comprometió en junio pasado durante un recorrido con lugareños, que antes de finalizar el año, la Conagua retiraría 600 hectáreas infectadas de lirio y dar a conocer los avances, además de poner a funcionar las plantas tratadoras.
