Irapuato, Guanajuato.- Jesús Hernández Soria de 60 años, originario de Romita, ha dedicado casi toda su vida a ser conchero gracias a la tradición que siguió por parte de sus abuelos y que ahora una de sus hijas también continúa. Este 12 de diciembre, él junto a su grupo realizan las danzas tradicionales en el marco de esta ceremonia religiosa.
Desde 1965 a Jesús Hernández le gustó la actividad, ahora luce su tradicional traje de conchero con los elementos que representan las danzas prehispánicas, llenas de color y energía, muchas veces sin importar los fuertes rayos del sol, condición que se ha ganado con los años.
“Esta es una tradición, una devoción que llevamos a la Santísima Virgen y a todos los santos que veneramos. Yo vengo de tradición, yo soy un conchero, un conchero que realmente disipamos cualquier energía buena hacia Dios, primeramente”.
El grupo de danza del que él forma parte se integró hace 48 años aproximadamente y explicó que su trabajo es que “damos curaciones de sanación a Dios, primeramente, para podernos nosotros realizar este trabajo, aquí nosotros damos auxilio espiritual a la persona que lo necesita por eso es nuestro trabajo, el don que nosotros traemos para poder realizar esto, estas ceremonias son muy bonitas, son religiosas”.
A sus 60 años, Jesús Hernández expresó en tono burlesco que no le duele ningún hueso y por su condición física compite con los muchachos. Además de conchero, ha combinado esta actividad con la de ser maistro albañil.
