El cáncer de ovario es una de las neoplasias malignas que afectan a la mujer, generalmente de la quinta a la séptima década de la vida, no existe una causa definida como tal, pero existen factores que predisponen a padecer esta enfermedad.
“Los factores más importantes son los genéticos, presencia del gen BRCA, pacientes con antecedente de cáncer de mama, cáncer colo-rectal; mujeres con terapias hormonales de remplazo y con algunas otras patologías oncológicas, tienen mayor riesgo de presentar cáncer de ovario”, indicó el jefe de Ginecología de la Unidad Médica de Alta Especialidad No. 48 del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), doctor Dámaso Rizo Rizo.
Esta enfermedad generalmente se diagnostica en etapas avanzadas en estadios III ó IV. La paciente acude con el médico por algún síntoma gastrointestinal, obstructivo, dispepsia o indigestión, pero al ser examinada se identifica tumoración palpable.
No existe un tamizaje o prueba de escrutinio para realizar un diagnóstico de manera temprana como en el caso de cáncer cérvico- uterino o de mama, en el caso del cáncer de ovario es básicamente como hallazgo, por lo que es importante que el profesional de la salud explore adecuadamente a la paciente cuando refiera alguno de los síntomas mencionados. Se puede tener apoyo en ultrasonidos endovaginales en mujeres postmenopáusicas para identificar algún tumor.
El especialista Rizo Rizo comentó que en la UMAE No. 48 se atiende un promedio de 280 pacientes oncológicas, 48 de primera vez a la semana, de las cuales con patologías de ovario representan un 30%.
Si se detecta en las primeras etapas, el cáncer de ovario es curable en una probabilidad del 80%, pero la dificultad es que generalmente la paciente llega en etapas avanzadas a revisión médica, indicó.
Es importante que las y los médicos hagamos conciencia sobre el cáncer de ovario y notificar a la mujer sobre los factores de riesgo como los genéticos, para estar en posibilidad de seguimiento desde edades tempranas.
