José María Sosa Álvarez, estudiante de Mecatrónica en la Universidad del Valle de México campus Puebla, asesinó a su novia embarazada Paulina Camargo Limón porque ésta se negó a abortar.
El joven universitario de 20 años confesó que estranguló a la joven, de 18 años, y que se deshizo del cadáver en bolsas de basura que tiró en un relleno sanitario.
El crimen ocurrió el martes pasado, en el departamento de la Unidad Habitacional de La Margarita donde vivía el presunto homicida.
Desde entonces la víctima era buscada por sus familiares a través de redes sociales y el sábado pasado, luego de que fue detenido Sosa Álvarez y aparentemente confesó el crimen, las autoridades ordenaron la búsqueda de la joven embarazada en el relleno sanitario de Chiltepeque.
Autoridades ministeriales y rescatistas llegaron desde la madrugada del domingo al relleno sanitario, ubicado al oriente de la ciudad de Puebla, pero se les impidió el acceso debido a que no llevaban una orden judicial.
Indicó que horas después, hacia el mediodía, se inició la búsqueda de las supuestas bolsas con los restos de la joven, pero se interrumpió tres horas más tarde “ante la imposibilidad de encontrarlos entre 5 mil toneladas de basura”.
La joven fue asesinada por su novio después de discutir y luego de que éste, indicó el reporte, no pudo convencerla de interrumpir su embarazo de 18 semanas.
El detenido fue recluido en el Centro de Reinserción Social (Cereso) de San Miguel, después de supuestamente confesar que golpeó y estranguló a la joven porque en dos ocasiones se negó a abortar.
Oficialmente, la Procuraduría General de Justicia de Puebla no ha proporcionado ninguna información del caso.
