Irapuato.- Todo maestro tiene su forma de ser, su personalidad y su pedagogía “pero la filosofía que yo aplico a mis alumnos es realmente ver una enseñanza-aprendizaje, ¿Queremos que aprendan? Que aprendan, que no vean en nosotros ogros, que no vean en nosotros a personas que hasta los hacemos que se sientan incómodos, se presiones, estén en estrés, por ahí no va la educación, creo yo que la educación se debe disfrutar, yo les digo a mis alumnos: aprendan con gusto, en vez de que estemos aburridos creo yo… decir ¿qué voy a aprender hoy”?.
Así lo manifestó el docente de la Escuela de Nivel Medio Superior de Irapuato (ENMSI) Melchor Palma Rojas quien ha dedicado 42 años a esta profesión que le ha dado más satisfacciones que “tragos amargos”.
Abogado y docente de profesión, Melchor Palma ha compartido desde los 18 años su experiencias y conocimientos con sus alumnos en diferentes instituciones como la Secundaria Oficial Municipal, el Colegio Juan Duns Escoto, el Colegio Atenas, el Colegio Motolinía, el Colegio Pedro Martinez Vázquez, en el Irapuatense, entre otras instituciones académicas y actualmente la Preparatoria Oficial impartiendo la asignatura de Ciencias Sociales.
“Desde que salí de la primaria, secundaria, mi idea era ser abogado y pues a veces se dan las cosas y se me dio la oportunidad de compartir experiencias con mis compañeros cuando no iban los maestros y eso me abrió las puertas para más adelante tomar un lugar en el campo docente, entonces opté por la docencia pero ya con una preparación”, platicó.
Vio la necesidad de prepararse como docente, fue bachiller e hizo la Nivelación Pedagógica y en Querétaro estudió la Normal Superior para impartir clases en el nivel medio superior y superior.
La docencia para Melchor Palma “es una profesión muy bonita muy loable, una profesión bastante… vamos a llamar dedicada a una educación totalmente integral, a veces creo yo que no alcanzamos a entender lo que es la enseñanza-aprendizaje, creemos que sólo es de apréndete esto, estas fechas, etc, pero creo que nuestra profesión va más allá, así como lo contempla el artículo tercero de la Constitución debe ser integral; ojalá que se apreciara de esa manera, una profesión en la que compartas conocimientos pero puedas compartir con tus alumnos experiencias y puedas ayudarles en la cuestión académica y emotiva”, dijo el docente.
Entre sus anécdotas el docente recordó una al inicio de su carrera profesional “yo cuando empiezo a trabajar empiezo muy joven de 18 años y me encuentro con un grupo de trabajadoras social, muchachas más grandes, inclusive más grandes que yo y pues mi primera impresión es – ¡ah caray! ¿Qué hago?-, pues ya estando ahí, pues vamos a ver qué puedes hacer, nos preparamos y pues esas experiencias que de repente te encuentras con personas mayores y dices tú pues sí agarran un poco los nervios pero ya el conocimiento te va dando la seguridad, la confianza”, contó.
Enfatizó que durante todos estos años de docencia, Melchor Palma ha pasado por “más satisfacciones que tragos amargos”.
