Más de 110 mil personas han muerto en Siria desde el inicio del conflicto en marzo de 2011, que se ha convertido en una guerra civil, denunció hoy el opositor Observatorio Sirio de Derechos Humanos (OSDH).
El organismo defensor de los derechos humanos presentó este domingo un balance sobre las víctimas en Siria al finalizar el mes de agosto, basado en reportes de fuentes médicas, militares y civiles en todo el país, según un despacho de la cadena árabe Al Arabiya.
De acuerdo con el balance, hasta este 31 de agosto han muerto en Siria un total de 110 mil 371 personas, de ellas 40 mil 146 eran civiles, 21 mil 850 combatientes rebeldes y 45 mil 478 más miembros de las fuerzas de seguridad sirias y milicias pro gubernamentales.
Además, el OSDH ha contabilizado hasta ahora dos mil 762 cuerpos no identificados, mientras que se estima que al menos nueve mil personas han sido detenidas y tres mil 500 soldados capturados por rebeldes.
De los 40 mil 146 civiles que han perdido la vida en los casi 29 meses que ha durado la rebelión contra el presidente Bashar al-Assad, convertida ahora en una guerra civil, tres mil 905 eran mujeres y cinco mil 833 pequeños, menores a los 16 años de edad.
Entre el número de rebeldes fallecidos, también se incluye a 15 mil 992 civiles que se levantaron en armas, tres mil 730 combatientes extranjeros y dos mil 128 miembros de las fuerzas de seguridad sirias que desertaron.
