Por Sara Garibaldi
Twitter: @saritabu
Irapuato, Guanajuato
“Es una gran alegría para la iglesia pero sobre todo para quienes pudimos conocer a Juan Pablo II, que estas personas tan cercanas a nosotros sean declaradas santos, no es algo muy lejano o abstracto sino algo muy concreto que se haga en personas cercanas a nosotros”, expresó el Obispo de la Diócesis de Irapuato, José de Jesús Martínez Zepeda.
Lo anterior luego de que este domingo se llevó cabo de manera simultánea la santificación de Juan Pablo II y Juan XXIII.
“Fue muy bonita, muy sencilla, sobre todo para el pueblo mexicano porque el Papa Juan Pablo II nos ayudó a los mexicanos a muchas cosas”.
Recordó la frase de Juan Pablo II “Quiero ser mexicano” en alguna de sus visitas a México, sin embargo cuestionó el hecho.
“El Papa vino y dijo yo ya quiero ser mexicano, está bien quiere ser mexicano pero si ni los propios mexicanos nos queremos…narcos tramposos, ¿Usted quiere ser mexicano, quiere ser uno de los nuestros”, además de que dijo el pueblo mexicano pierde identidad al adoptar nombres extranjeros.
Para celebrar la canonización de Juan Pablo II y Juan XXIII, el Colegio Juvenil realizó una vigilia durante la noche y madrugada de este domingo con cánticos y recordando el mensaje de Juan Pablo.
Asimismo, hoy por la tarde después de la misa ofrecida a las 12:00 horas, Martínez Zepeda colocó un ramo de flores sobre la escultura de Juan Pablo II ubicada a un costado de la Catedral de Irapuato, “Como agradecimiento al mensaje que dejó a la Iglesia”, señaló.
