Irapuato, Guanajuato.- Comenzaron a arreglar los taludes del Cuarto Cinturón Vial para evitar otro desgajamiento, pero el problema fue que la empresa “destruyó” toda la flora que estaba en una de las orillas. A la par el crecimiento desmedido de casas en lo que se supone un día fue un área natural protegida sigue acabando con todo y al parecer no hay autoridad que ponga un alto.
A casi un año de que cayeron algunas rocas y cemento en los carriles de circulación en el Cuarto Cinturón Vial del tramo que va del bulevar Arandas hacía Villas de Irapuato, se han realizado diversos trabajos de remodelación y reconstrucción.
Sin embargo, para ello al menos fueron destruidos unos 100 metros lineales por tres a cuatro metros de ancho, todo ello al parecer para poder meter una camioneta, detallando que esto es solamente por la orilla, porque en el interior del cerro también hubo deforestación.
Esto es por el lado gubernamental en el “arreglo” de un problema de desgajes, pero por el otro lado al parecer hicieron un conflicto con la deforestación; aunque podría señalarse que eso es mínimo en relación a la gran cantidad de casas que están construyendo y acabando con todo a su paso.
Inclusive en la parta baja del Cuarto Cinturón vial, las casas ya alcanzaron los carriles de circulación en un terreno que presuntamente debería respetarse y no podría construirse, pero es todo lo contrario.
